Tras el éxito de la primera edición (2022), en la que se proyectó de forma inédita el filme ‘20.000 ESPECIES DE ABEJAS’ de Estibaliz Urresola, y varios tarraconenses y tarraconenses fueron los primeros afortunados en verla; la actividad Screening Test (proyección de prueba) vuelve para quedarse.

Se trata de una iniciativa en la que la sección de industria del Festival REC abre sus puertas a la ciudadanía y ofrece la oportunidad de conocer el cine «en crudo» a partir de una película aún no estrenada, participante en el laboratorio de acompañamiento del Primer Test. Se lleva a cabo en el Teatret del Serrallo.

La sesión, de duración aproximada de dos horas, cuenta con la participación de parte del equipo de dirección y producción del filme, así como de Álvaro Vega, fundador de la agencia de marketing y comunicación Doble Sentido, responsable de la promoción de 150 películas y de 2 candidaturas españolas a los premios Òscar.

Vega se encarga de dinamizar la jornada y recoger las impresiones de los asistentes en la sala, que son partícipes de una experiencia pionera y única en el Estado. El feedback del público sirve a los creadores y creadoras del filme a pensar en sus audiencias antes de iniciar un recorrido en el circuito de festivales cinematográficos -nacionales e internacionales-, además de llegar a las pantallas de los cines.

El título, la temática, la duración y otros aspectos técnicos de la película no se desvelan hasta que los espectadores llegan a la sala, puesto que se trata de uno de los proyectos participantes del Primer Test, que este año llega a su decena edición. De hecho, uno de los objetivos de la proyección es dar a conocer la sección de industria del Festival REC, que permite construir puentes entre directores noveles y expertos internacionales del sector del cine: productores, directores, distribuidores, programadores…

Aquellos que quieren participar de esta innovadora experiencia cinematográfica -completamente gratuita- deben rellenar un formulario, especificando sus datos de contacto y sus intereses y motivaciones para asistir a la proyección. Asimismo, es requisito indispensable firmar un contrato de confidencialidad el mismo día de la actividad, a fin de asegurar que nada de lo que hayan visto salga de la sala de cine.