Piccolo Corpo

Italia, 1900. Ágata es una joven madre devota y obstinada, que se niega a que su bebé, muerto al nacer, sea condenado al limbo. Y mientras su pueblo le da la espalda, ella seguirá la leyenda de que existe un lugar en las montañas donde su hijo puede ser bautizado. Entre lagos, caminos, bosques y brumas, avanzando entre un paisaje de fábula va encontrándose con personajes que describen un paisaje, y secundada por episodios de sororidad, apoyo y relaciones silenciosas seguirá la estela de un pequeño milagro.

Laura Samini debuta con una potente historia que fascinó a Cannes, retratando un momento histórico en los confines dónde Italia se vuelve Europa pero sigue siendo mágica. Una película de época con una mirada contemporánea, que muestra que la esperanza y la solidaridad puede derrumbar cualquier frontera.

Debate online con la directora una vez terminada la proyección.